Nuestra Asociación Apostolado de la Divina Misericordia de Valencia, junto con comunidad parroquial de San Francisco de Borja de Valencia, vivió ayer una cena solidaria con miembros de los distintos grupos de pastoral, así como con voluntarios y socios de nuestra Asociación.

Momentos antes de la cena, destacó la implicación de los jóvenes voluntarios en los preparativos y la organización del evento. El encuentro contó con una primera presentación acerca del origen, objetivos y otros aspectos de la Asociación. Seguidamente, se reprodujeron distintos vídeos que resumen la labor llevada a cabo a pie de calle, momento que se complementó con el testimonio que quisieron aportar algunos de los jóvenes voluntarios.

Es desde el año 2016 hasta ahora, sin interrupción, el tiempo que lleva la Asociación acompañando a las personas más vulnerables de nuestra ciudad, en palabras textuales de nuestro presidente, Rvdo. Sr. D. Pedro Miret Giner, "la realidad que vive la ciudad de Valencia por las noches en los lugares más recónditos no tiene nada de semblante a la realidad diurna"; y añadió "a pesar de que parece que vivamos en una sociedad primermundista, todavía hay centenares de personas viviendo al ras de la noche en condiciones inhumanas".

Los objetivos de la cena solidaria se centraron en la recaudación de fondos para sufragar la comida de fraternidad que compartiremos con las personas sin hogar mañana domingo, 14 de noviembre. Nuestro deseo es hacer que estas personas se sientan como en casa, y que sean los jóvenes y adultos voluntarios quienes les sirvan su plato de comida caliente.

Tras una agradable sobremesa, se han preparado diversas actividades lúdicas, con bailes y karaoke, para compartir una tarde de fraternidad. Además se les entregará como regalo de la jornada una bolsa del peregrino con otra muda de ropa, una manta nueva a estrenar y un lote de productos de higiene de primera necesidad, con cepillo de dientes y dentífrico, jabón o colonia, entre otras cosas. 

“Queremos que se sientan parte de nuestra familia, como nuestros hermanos, que es lo que nos pide el Papa en su mensaje de la Jornada de los Pobres y lo que llevamos haciendo en el Apostolado de la Divina Misericordia desde 2016”, explicó nuestro presidente en declaraciones a la prensa y que se espera a más de medio centenar de personas en la celebración jubilar.

Los niños y jóvenes, papás y personas mayores que quisieron acompañarnos ayer en la cena solidaria, experimentaron los vínculos creados entre la Asociación Apostolado de la Divina Misericordia con la parroquia San Francisco de Borja de Valencia y la implicación de tantos voluntarios sin los cuales en palabras de Miret, "nada sería posible".

Esperamos que este Jubileo, enmarcado dentro de la Jornada Mundial de los Pobres, y del Año Jubilar de San Francisco de Borja, sea ocasión propicia para acercarnos a Dios por medio de nuestros hermanos y produzca abundantes frutos espirituales.

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